En un lapso menor a las 48 horas, se capturó a los hermanos Germán y Sebastián Kiczka, investigados por delitos de explotación sexual infantil. Incomunicados y puestos a disposición de la justicia provincial, el diputado puertista y su hermano deberán dar explicación sobre los oscuros hechos que se les suscriben.
Gracias a un operativo articulado entre diversas fuerzas de seguridad, el caso Kiczka tuvo un revés crucial y el diputado de Activar quedó en el ojo de la tormenta. En un lapso menor a las 48 horas, se capturó primero al legislador puertista, Germán Kiczka, en un bungalow de la zona costera de Loreto, Corrientes. Y luego, su hermano Sebastián tuvo el mismo destino en un paraje a pocos kilómetros de Apóstoles.
De esta manera, comenzó un nuevo capítulo de la causa por presunta explotación sexual infantil. En esta nueva etapa, el Juez de Instrucción N° 4 de Apóstoles, Miguel Ángel Faría, leyó al legislador de Activar, en detalle, los delitos por los que se lo acusa.
Qué le espera al diputado Kiczka
En esta oportunidad, Germán Kiczka tomó una postura diferente al momento de su arresto y decidió no realizar declaraciones. En la localidad de Apóstoles, bajo una estricta custodia policial y la convocatoria espontánea de la ciudadanía, el juez le mostró al imputado cada uno de los aberrantes archivos que se encontraron en su computadora.
Para ello, personal de la Secretaria de Apoyo para Investigaciones Complejas (SAIC), ingresó al juzgado con la computadora secuestrada al diputado puertista al momento del allanamiento.
Por su parte, Sebastián Kiczka llegó este viernes al juzgado y permanece sin comunicación alguna con su hermano. En su caso, se confirmó que será indagado este sábado.
