La intervención policial fue este domingo antes de las 18 en la casa de Victor Olivera, de 68 años de edad, a quien habían denunciado como responsable del sitio donde se llevaban a cabo esas prácticas clandestinas.
La Policía trabajó en el lugar durante más de una hora, confirmando la denuncia de los vecinos, por lo que secuestraron del lugar 5 gallos que eran utilizados para las sangrientas peleas entre los animales y además se procedió al secuestro de botellas de cerveza (vacías y llenas), envases de vino del tipo tetrabrik, un ring con estructura y base de metal recubierto con bolsas de nylon, dos cuchillos.
Además de la detención de Olivera, la Policía procedió a la identificación de 20 personas que participaban del evento clandestino, el cual tiene como fin, apostar dinero por determinados gallos en las peleas a muerte que se organizan clandestinamente.
El valor de los gallos de riña actualmente varía entre los 7.500 pesos y los 10 mil. Según fuentes del caso, algunos de los gallos secuestrados en el operativo dominguero, estarían drogados. Y se aseguró que es una práctica común entre los dueños de los animales que los preparan exclusivamente para las peleas por dinero.