El mandatario recordó en declaraciones al canal Todo Noticias que por los pazos fronterizos de Posadas e Iguazú, “pasan 23 millones de personas. Y cuando se pueda abrir las fronteras, esas ciudades deben estar blindadas por vacunas y con su población inmunizada”.
Mientras que la vacunación avanza lento en la Argentina, la circulación de variantes del coronavirus como la de Manaos y Río de Janeiro, aumenta la preocupación entre las autoridades nacionales y provinciales. Foz de Iguazú, en el lado brasileño de las Cataratas, y otras ciudades del Sur del país vecino sufren uncolapso sanitario y las alarmas están puestas en los pasos fronterizos, en donde la circulación de bienes y personas es constante.
“Nosotros hemos solicitado un mayor número de vacunas, porque hay ciudades que deben estar blindadas una vez que se abran las fronteras. Son 12 millones de personas por año las que cruzan entre Puerto Iguazú y Foz, y 11 millones lo hacen entre Posadas y Encarnación (Paraguay). Solo con esos dos pasos tenemos 23 millones de personas. Y cuando se pueda abrir, esas ciudades deben estar blindadas por vacunas y con su población inmunizada”, dijo a TN, Oscar Herrera Ahuad, gobernadora de Misiones.
Al igual que sucede en Paso de los Libres (Corrientes), que mira de reojo el padecimiento que vive Uruguayana (Brasil), Misiones tiene cerradas sus fronteras internacionales y solo permite el paso del transporte de carga; “y alguna situación muy puntual que sea especialmente autorizada”, aclaró Herrera Ahuad.
“Somos una provincia que tiene el 92% de su frontera entre otros dos países. Hay más de 40 ciudades de Brasil que tienen límite directo con nosotros, y en varias de ellas el sistema sanitario está en su límite. Y vemos que Paraguay también está muy complicado”, sostuvo el gobernador, de 49 años y médico pediatra de profesión.
Actualmente, Misiones tiene cuatro puestos donde es obligatoria la presentación de un test de PCR negativo: El Arco de Ruta 12, que conecta a la provincia con su vecina Corrientes; el cruce Centinela, en la Ruta 14; y los aeropuertos de Posadas y Puerto Iguazú.
Si bien Herrera Ahuad aclaró que “tenemos reforzada la vigilancia de frontera”, reveló un impreciso método de control ciudadano que -según afirmó- dio buenos resultados en Misiones. “Por ejemplo, en la ciudad de Bernardo de Irigoyen, que conecta con las brasileñas Dionisio Cerqueira y Barracao, la gente pasa caminando de un lado hacia el otro. Si alguien no cumple con alguna disposición sanitaria, automáticamente los ciudadanos lo denuncian. Ahí la vigilancia la hace la propia gente”, contó.
Pero hay más motivos de alarma para Misiones y sus cruces de frontera con Brasil a través del Río Uruguay. “Lo que en este último tiempo nos preocupa es el contrabando de granos en las localidades ribereñas, como Colonia Aurora, Alba Posse o El Soberbio. Son pasos que se hacen en canoas o pequeñas balsas, y allí detectamos contrabando de soja”, remarcó.