El llamado existió. Lo confirmó el propio Armando Pérez. “Gracias, pero este no es el momento oportuno para dirigir la Selección”, le contestó Marcelo Bielsa. Y la respuesta fue lógica. El entrenador que fracasó en el Mundial de Corea-Japón 2002 y ganó los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 entendió que la comunicación tuvo un carácter estrictamente protocolar. Que nunca fue un candidato serio para reemplazar a Gerardo Martino, tal cual adelantó Clarín. Y declinó la reunión con el presidente de la Comisión Normalizadora. También quedó fuera de carrera Jorge Sampaoli.
“Hablé con Bielsa. No le ofrecí el cargo. Le pregunté si podíamos charlar. Es una persona íntegra y muy valiosa”, le dijo Don Armando a la agencia de noticias Télam.
“No tiene chances”, insistían ante este diario quienes conocen la cocina de las negociaciones. Es que se analizaron varias situaciones a la hora de evaluar una propuesta concreta. Que se haya quedado sin “energía” hace una docena de años, que sea un hombre de personalidad compleja y que esté enfrentado ideológicamente con el Gobierno, pesaron más que su capacidad como entrenador. De todos modos, Pérez marcó su número telefónico. Mostró cintura política. Se lo habían pedido varios dirigentes, entre ellos Pablo Toviggino, presidente del Consejo Federal e integrante de la Junta Regularizadora.
Sampaoli tampoco podrá sentarse en el banco que dejó vacante el Tata. “Si te vas, conseguite un buen abogado”, le habría dicho Monchi al técnico en Sandhausen, donde Sevilla realiza la pretemporada. Y por la tarde alemana, el presidente José Castro Carmona le comunicó que, de ninguna manera, aceptará la idea del DT part- time que se le ocurrió a Fernando Marín, coordinador de Fútbol Para Todos.
El santafesino no renunciará y recién en enero podría quedar sellada su salida, a cambio de una cifra que oscila entre 6 y 9 millones de euros. “¿Es posible imaginar a esta AFA quebrada poniendo ese dinero cuando no puede pagar ni la luz?”, se preguntó un directivo en los pasillos de Viamonte.
¿Qué dirá Jorge Messi, que había dejado traslucir entre sus íntimos que Sampaoli y Bielsa -además de los automarginados Diego Simeone y Mauricio Pochettino- eran ideales para su hijo? Ajeno a todo, Leo se entrena con Barcelona y, por ahora, no piensa en retornar a la Selección hasta 2017. ¿Podrá convencerlo el nuevo técnico de que pegue la vuelta antes?
¿Y quién será? Bajo esta coyuntura, Edgardo Bauza y Miguel Angel Russo siguen siendo los principales candidatos. Y así como el ex entrenador de Boca ofreció trabajar con el cuerpo técnico de Alejandro Sabella, el Patón está dispuesto a sumar a su grupo de tareas a Jorge Burruchaga. De este modo, uno de los campeones del ‘86 que impulsan desde la Casa Rosada tendría su lugar preponderante.
Miguelito le dijo a Pérez que Pablo Blanco, Julián Camino y Claudio Gugnali podrían acompañarlo en la Selección. Bauza no tiene drama en compartir sus labores con Burruchaga. Junto a él seguirán Bruno Militano y José Di Leo, con quienes dirige San Pablo.
Lo cierto es que el 14 de agosto habrá que presentar la lista para las Eliminatorias. Y hay dos entrenadores a la vista: Bauza y Russo.