El golf tendrá un lugar de privilegio en los Juegos Olímpicos de Río, ya que esta disciplina regresa al evento deportivo de excelencia tras 112 años. Pero habrá una baja sensible: Rory McIlroy, estrella del circuito del PGA y ex número uno del mundo, renunció a participar.
El norirlandés, actualmente tercero en la clasificación mundial, comunicó que no formará parte de la competencia debido al riesgo de contraer allí el virus del Zika.
“Aunque el riesgo de infección por Zika está considerado bajo, es sin embargo un riesgo y un riesgo que yo no quiero asumir”
En un comunicado, McIlroy señaló que después de hablarlo con su entorno, se ha dado cuenta de que su salud y la de su familia “está antes que todo lo demás”.
De esta forma, el regreso del golf a los Juegos Olímpicos por primera vez desde 1904, no será con grandes nombres. McIlroy se bajó al igual que otras grandes figuras de la actualidad como Adam Scott, Marc Leishman, Louis Oosthuizen, Vijay Singh o Charl Schwartzel.
Como muchos deportistas de Irlanda del Norte, el golfista de 27 años había elegido competir bajo la bandera de Irlanda, por lo que el Comité Olímpico Irlandés fue el que lamentó su baja y el que brindó tranquilidad al resto de sus atletas: “Tenemos una confianza total en que los Juegos serán seguros para todos los deportistas.”
El zika puede causar defectos de nacimiento como la microcefalia y es un virus que se puede transmitir sexualmente. Fue por ello que el campeón olímpico de salto en longitud, el británico Greg Rutherford, tomó la decisión de congelar esperma antes de viajar a Brasil.