El presidente de YPF, Horacio Marín, confirmó que la empresa redujo el precio de la nafta en un 1% y del gasoil en un 2% a partir de las 00 horas de este martes.
De esta manera, el litro de nafta Súper de YPF pasó de 1.182 a 1.170 pesos en estaciones de servicio de bandera de la capital misionera, mientras que la premium bajó de 1.420 a 1.406 pesos.
En cuanto al gasoil, la Infinia Diesel se mantiene en 1.444 pesos y el Diesel 500 a 1.174 pesos.
Esta medida se aplica en todas las estaciones de servicio de la marca en el país. Shell también anunció una baja similar, y se espera que Axion y Puma sigan el mismo camino.
Horacio Marín explicó que la baja en los precios responde a las variaciones en el precio internacional de los combustibles. Aunque las refinerías de YPF venderán nafta con un recorte del 4% y gasoil con una rebaja del 5%, el impacto final en el surtidor será menor debido al aumento del impuesto a los combustibles y la variación del tipo de cambio.
Marín destacó que la reducción en los precios mayoristas será significativa, pero los consumidores solo verán parte de ese ajuste en los surtidores debido a la combinación de impuestos y variaciones en el tipo de cambio. “El esfuerzo de YPF es del 5% en el gasoil y del 4% en la nafta, pero lo que la gente verá reflejado será una baja del 2% y del 1%, respectivamente”, explicó. El presidente de YPF también criticó el alto porcentaje de impuestos municipales que gravan el precio final de los combustibles, señalando que en algunos municipios estas tasas llegan al 25% del valor final del producto. “Es una tasa municipal que no tiene mucho sentido para el precio de los combustibles. Me parece injusto con los consumidores”, expresó.
Marín abordó el futuro de Vaca Muerta y el proyecto con la compañía Petronas. Aunque existen rumores de que la empresa malaya podría abandonar el acuerdo, Marín aclaró que la decisión final aún no ha sido tomada. “Petronas tiene hasta noviembre para decidir si continúa o no”, explicó, enfatizando que la viabilidad del proyecto dependerá de la obtención de contratos de compra de gas en Europa y Asia.
Finalmente, Marín confirmó que el gas licuado proveniente de Vaca Muerta será exportado desde el puerto de Río Negro, una decisión basada en razones económicas y logísticas. Esta infraestructura permitirá incrementar significativamente las exportaciones energéticas de Argentina, con la expectativa de generar ingresos de hasta 30.000 millones de dólares para 2030.