Los informes de la Policía Científica sostienen que el automóvil, en el que cinco estudiantes se dirigían a una clase de educación física, superó el triple de la velocidad permitida en el tramo donde ocurrió el siniestro.
El informe completo, elaborado por la Dirección Policía Científica de la Policía de Misiones respecto a la pericia accidentológica al siniestro vial que se llevó la vida de dos estudiantes de quinto año del colegio Santa María el jueves 11 de abril en la costanera, ingresó ayer al expediente que encabeza el juez Correccional y de Menores 2, César Raúl Jiménez, e indica como conclusión destacada que el Peugeot 207 en el que los cinco adolescentes se dirigían a una clase de educación física se movilizaba a una velocidad promedio que superó el triple del máximo permitido para el tramo específico de la costanera de esta capital.
De acuerdo a fuentes consultadas citadas por el diario Primera Edición, el automóvil que en un derrape colisionó una camioneta estacionada al borde de la vereda del margen del río Paraná y se cruzó de carril para impactar contra el cordón cuneta opuesto y volcar, transitaba en una velocidad promedio de 99,78 kilómetros por hora, cuando el tramo y como lo indica la señalética no permite superar los 20 km/h.
Vale recordar que la tragedia se registró sobre la costanera y la rotonda de la avenida Comodoro Rivadavia (frente a la exusina de EMSA) poco después de las 13.30 y cuando los menores se dirigían a tomar la clase de educación física en el polideportivo de la institución religiosa de las avenidas Centenario y Zapiola.
El impacto provocó lesiones determinantes para el deceso de Luca Ceballos y Juan Cruz Martínez, ambos de 17 años y compañeros de aula de los tres sobrevivientes, entre ellos el conductor del Peugeot 207 Compact Active gris.
Los resultados de las pericias accidentológicas a los que este Diario tuvo acceso, indican que la velocidad máxima que alcanzó el vehículo -entre las avenidas Roca y Comodoro Rivadavia- superó los 100 kilómetros por hora.
El estudio con parámetros rigurosos fue aplicado a las huellas de derrape registradas. De acuerdo al punto anterior más próximo al registro (huellas) se estimó un mínimo de velocidad de 93,52 kilómetros por hora y un máximo de 105,78 kilómetros por hora. De estas cifras se coteja la distancia del derrape y el impacto con la camioneta utilitaria Hyundai H-100. El promedio señala: 99,78 kilómetros por hora.
Con estas pericias incorporadas al expediente, las mismas fuentes indicaron que resta para el análisis del juez y la fiscal María Laura Álvarez, un informe del Hospital “Dr. Ramón Madariaga” con las atenciones e historias clínicas de los heridos y fallecidos.
Una vez que estos documentos lleguen a la Justicia, se aguardaría el análisis para definir una acusación o no sobre lo sucedido y la elevación a juicio oral.
Hasta el momento se investiga un “homicidio culposo en accidente de tránsito”, con dos víctimas fatales y tres lesionados. Otras voces de pasillos de tribunales y expertos en los tiempos judiciales, estimaron que en agosto podría concretarse el cierre de la instrucción y el pedido de debate oral.
La imputación al estudiante de 17 años y conductor del automóvil protagonista, fue solicitada por la fiscal Álvarez el 22 de mayo, y pocos días después amplió el expediente con el pedido de la inhabilitación provisoria para que el investigado no vuelva a conducir, es decir, se le quitó la licencia respectiva.
Con información de PE
