Luego de estar internado durante 16 días, Mario Maidana (42), acusado de asesinar a su ex mujer en un motel de Posadas, fue dado de alta. Ante esto, se espera que entre lunes y martes sea trasladado ante la Justicia para dar su versión de los hechos y ser imputado por el femicidio de Natalia Castro (41).
El hombre estuvo internado luego de ser hallado en el baño del hotel alojamiento junto al cadáver de la víctima con una grave lesión en el cuello, autoprovocada con una botella de cerveza. Primero fue alojado en el Hospital Madariaga, pero luego se definió su traslado al Favaloro.
Ante esto la Policía de Misiones y las autoridades del hospital montaron un operativo para sacarlo del nosocomio. El presunto femicida fue alojado en la Seccional Cuarta a la espera de determinaciones del Juzgado de Instrucción Tres, a cargo del juez Fernando Verón.
Se espera que entre lunes y martes se trasladado a sede judicial para prestar declaración, aunque también podría negarse.
El hecho
El hecho fue descubierto cuando faltaban 30 minutos para que llegue la medianoche del miércoles 18 de enero, en el establecimiento ubicado en la intersección de las avenidas López y Planes y Monseñor de Andrea. Efectivos de la Unidad Regional II se dirigieron al motel Deseos luego de una llamada al 911.
Un empleado del lugar, identificado como Diego B., manifestó a efectivos de la Policía de Misiones que una pareja, que era cliente habitual, había ingresado a pie al hotel transitorio aproximadamente a las 15, pagando en una primera instancia dos horas de alojamiento en la habitación número 4.
Luego, ya pasada la hora pagada, el sujeto volvió a llamar al empleado del albergue y abonó hasta las 23. En este marco, antes de haber culminado el período contratado, el trabajador del sitio se volvió a comunicar con la pareja para saber si iban a abandonar el cuarto o extender nuevamente su permanencia.
Para eso se dirigió a la habitación y en ese momento observó sangre en la mano del agresor, sin escuchar ni ver a la mujer que había ingresado con él. Ante esta alerta, el trabajador solicitó presencia policial. Al llegar al complejo, los uniformados golpearon la puerta de la habitación donde se encontraba la pareja, sin obtener respuestas.
Observaron a través de la ventana manchas rojizas esparcidas en el piso de la habitación. Debido al terrible panorama se puso en conocimiento a un oficial superior y a las autoridades del Juzgado, quienes se trasladaron al sitio y siguieron de cerca las actuaciones de rigor.
Una vez que el oficial llegó al lugar, se realizaron trabajos por parte de la Policía Científica.
Ya dentro de la escena encontraron a ambas personas inconscientes en el baño. En ese momento, los oficiales presentes se dieron cuenta de que la mujer ya se hallaba sin signos vitales. En tanto, el agresor estaba inconsciente pero con vida, por lo que fue trasladado de urgencia al centro médico.
La causa de muerte, según determinó la autopsia del Cuerpo Médico Forense, fue asfixia mecánica por estrangulación manual. Según se detalló, la mujer fue golpeada en la cara repetidas veces y tenía cortes superficiales que podrían haberse producido por una botella.
Con información de El Territorio