El juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, detuvo ayer a la ex secretaria de Documentación Presidencial durante el gobierno de Mauricio Macri, Susana Martinengo; al ex jefe de Contraingeligencia de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Diego Dalmau Pereyra, y a otros 20 acusados en la investigación por supuesto espionaje ilegal a funcionarios, políticos y empresarios.
También ordenó apresar a Martín Terra, otro ex agente de la AFI y ex pareja de Analía Maiorana, la actual esposa del vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli, según informaron fuentes judiciales.
En la resolución en la que ordenó las detenciones, Villena advirtió que “la magnitud de la estructura ilícita reseñada, cuya inserción abarcaría distintos ámbitos del Estado Nacional, Provincial y Local, permite presumir que quienes habrían participado en los hechos materia de investigación cuentan con los medios y/o vínculos para eludir la aplicación de la ley penal”, según el texto al que accedió Télam.
Ante esto, el magistrado ordenó detener a todos los involucrados para ser indagados ante el peligro de fuga o entorpecimiento de la pesquisa.
El juez advirtió estar ante “una organización criminal con inserción en el Estado Nacional, Provincial y Local, cuyos integrantes cumpliendo diferentes roles estratégicos y valiéndose de su calidad de funcionarios y/o empleados públicos y agentes y/o dependientes de las Fuerzas de Seguridad y/o de la Agencia Federal de Inteligencia, habrían llevado a cabo distintas maniobras ilícitas de carácter indeterminado”.
Villena detuvo además a los ex agentes de la AFI Jorge Sáez, Leandro Araque y Facundo Melo, como parte de un total de 22 órdenes firmadas ayer.
El listado incluye a Emiliano Matta, María Mercedes Funes Silva, María Fermani, Daiana Baldassarre, Denisse Tenorio, María Sáez, Jorge Ochoa, Andrés Rodríguez, Gustavo Ciccarelli y Juan Carlos Rodríguez, entre otros.
Entre los detenidos hay ex agentes de la AFI, ex policías de la Ciudad de Buenos Aires y empleados del Gobierno porteño y del Ministerio del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, según las fuentes.
También quedó detenido a disposición de Villena el ex jefe de Operaciones Especiales de la AFI, Alan Ruiz, quien ya estaba preso en otra causa que investiga espionaje ilegal al instituto Patria, a cargo de otro magistrado de Lomas
de Zamora, Juan Pablo Auge.
“Debe tenerse en consideración que, en virtud de la labor que ejercían los imputados, es dable sostener fundadamente que dada su expertise podrían entorpecer el desarrollo del proceso mediante la alteración de elementos de prueba o utilizar sus influencias para sustraerse de sus obligaciones”, fundamentó el juez al firmar las órdenes de detención.
Villena aludió a “los profusos elementos de prueba que se encuentran siendo analizados por este Tribunal, permiten inferir que los nombrados mantendrían vínculos con personal de distintas fuerzas de seguridad y sujetos aun no individualizados, que podrían facilitar su injerencia para frustrar la pesquisa”.
El juez remarcó que se investigan tareas de inteligencia y/o espionaje ilegal en infracción a la ley 25520 “en distintos períodos y abarcando diversas jurisdicciones”.
Algunas maniobras habrían consistido en “obtener información, producir inteligencia y almacenar datos sobre personas por el hecho de su raza, fe religiosa, acciones privadas, opinión poítica o de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias”, enumeró entre otras.
Las órdenes de detención se libraron a primera hora de la mañana de ayer y durante la jornada se iniciaron las declaraciones indagatorias, informaron las fuentes.
A medida que se concretaron los procedimientos algunos de los acusados fueron trasladados a la división Drogas Peligrosas de la Policía Federal.
Cómo operaba la banda
A esta altura de la investigación, está muy claro que los integrantes de Súper Mario Bros espiaban a dirigentes políticos del peronismo pero también de Cambiemos, así como líderes sindicales, el obispo Jorge Lugones, referentes de los movimientos sociales y hasta la hermana menor de Mauricio Macri, Florencia, y su pareja.
Esa información ilegal iba a Casa Rosada, en la que los espías estuvieron 12 veces, y a través del jefe de la banda, Alan Ruíz, a la AFI. Ruíz era el director de Operaciones Especiales, está detenido por otro juez, Juan Pablo Augé, y ahora pasa también a estar detenido en la causa de Villena.
La trama es de una gran envergadura, muy superior, por ejemplo, a lo que fue Watergate, que produjo la caída del gobierno de Richard Nixon por espiar a la oposición. Todo indica que se espió en las cárceles, en operaciones a través de Marcelo D’Alessio, en aprietes a testigos en la causa de Independiente y en la acción de Súper Mario Bros. En el expediente hay constancias de escuchas y seguimientos a los detenidos en el penal de Ezeiza, a sus parejas y a sus abogados, algo que no tiene muchos antecedentes en el mundo.











