En las últimas horas, se conoció una serie de hechos relacionados con el robo de ganado en la zona de Santo Tomé, destapando lo que sería una red que opera en el límite entre Corrientes y Misiones.
El primero de los casos se dio en el paraje Galarza, donde actuó de inmediato el destacamento del Priar luego de la denuncia de vecinos sobre disparos de armas de fuego en campos lindantes a la reserva Iberá. Más precisamente, los uniformados debieron dirigirse al predio propiedad de la familia Fleita, que tiene un particular coto de caza.
Allí, fueron demorados vehículos registrados en la “tierra colorada”, y quienes se encontraban trasladándose además poseían armas.
Una vez dentro del campo en cuestión, los efectivos, que recibieron apoyo de la Comisaría 1ª de Santo Tomé, pudieron constatar que había un animal faenado por lo que el Fiscal de la jurisdicción actuante definió el inicio de una causa contra los sujetos, así como a la vez ordenó el secuestro de las armas.
En otro hecho, intervino la Gendarmería, cuyos agentes detuvieron a una camioneta en el arco del límite interprovincial con Misiones. Dentro del automóvil se encontró carne recién faenada, con la particular información que obtuvieron a la vez respecto a que los ocupantes venían del paraje Galarza. Los nombres de dos de los cuatreros detenidos son Paulo César Goncalves, de la localidad de Apóstoles y Alberto Crispin Lorenzo, de Posadas, pero los implicados son muchos más.
Intervienen Senasa, Gendarmería y la Policía misionera. Se trataría de una red de abigeato interprovincial que se ocupaba de ingresar a campos correntinos para luego trasladar la carne a Misiones, para comercializarla en localidades de los alrededores limítrofes.
El Libertador
