Indignación e impotencia es lo que sintió ayer a la mañana el personal educativo del Neni (Núcleo Educativo de Nivel Inicial) N° 2032 del barrio Manantial de Posadas al descubrir que habían sido víctimas de delincuentes por segunda vez en el mes.
De acuerdo a lo que pudo reconstruir El Territorio, el último episodio de inseguridad fue alertado ayer a la mañana cuando la directora del establecimiento llegó al lugar para realizar una entrega de mercadería a padres y vecinos de la zona, actividad que vienen realizando durante la época de la pandemia por el coronavirus.
En esa instancia, constató que los ingresos a la institución se encontraban violentados y que el interior estaba completamente revuelto.
“El daño material que hicieron fue impresionante. Se tomaron el tiempo para todo. Yo por primera vez en mi vida vi que puertas de metal estaba completamente salida del marco. Directamenente desamuraron el marco de tanto que palanquearon”, graficó al respecto Claudia Bustamante, personal de servicio del establecimiento educativo.
La mujer detalló que los delincuentes prácticamente se llevaron todo lo que quedaba de valor.
Del sector de cocina sustrajeron una garrafa, una cocina y varios bolsones de mercadería, mientras que de la oficina de la dirección se llevaron un proyector, parlantes y computadoras del plan Conectar Igualdad.
“Se llevaron todo lo que quedaba y todo esto, excepto las computadoras, se compra gracias a la colaboración de los padres, por eso todo duele un poco más”, añadió Balmaceda en diálogo con este matutino.
Como si todo esto fuera poco, la impotencia del personal damnificado se eleva un poco más al saber que los autores del ilícito incluso se tomaron el tiempo para “desayunar” en el lugar.
“Nosotros creemos que fue durante la tormenta de anoche, para amanecer hoy (en referencia al martes), pero parece que se tomaron todo el tiempo porque hasta tuvieron la caradurez de preparase una taza de leche con galletitas en el escritorio de la directora”, agregó la mujer.
Según lo que se pudo saber, los delincuentes además forzaron varios ingresos a otras oficinas del establecimiento pero no lograron abrirlos y también dejaron una cenefa en la vereda del lugar, por lo cual creen que iban a volver a buscar una segunda tanda de objetos robados pensando que nadie iba a descubrir lo sucedido.
En este contexto, Balmaceda además indicó que es la segunda vez en el mes que sufren un hecho de inseguridad, por lo cual lo sucedido ayer volvió a significar un duro golpe contra todo el personal educativo.
Al respecto, agregó que “es la segunda vez que nos roban. La vez anterior los delincuentes se robaron tablets, equipos de música y otros elementos que hasta ahora no se pudieron recuperar”.
Tras conocer lo sucedido, el personal del lugar de inmediato alertó del hecho a la Policía y en el caso trabajó el personal de la Comisaría Decimotercera.
Los uniformados implicados acudieron al lugar ayer a la mañana y recabaron todos los datos, en tanto que también trabajó el personal de Criminalística, quienes recogieron varias pistas, entre ellas huellas dactilares que podrían permitir avanzar en el esclarecimiento del hecho.