Guardaparques del Ministerio de Ecología detuvieron el fin de semana a un cazador furtivo a quien sorprendieron en el límite del Parque Provincial de la Sierra de San José.
Todo empezó cuando los funcionarios detectaron rastros de personas en un sendero utilizados por cazadores, en una propiedad que tiene monte nativo y limita con el área natural protegida.
Luego de caminar unos 45 minutos, llegaron a un campamento hecho con lonas negras, donde encontraron colchones, mantas, elementos de cocina (ollas, cubiertos y demás utensilios), así también se observó que el fuego en el suelo estaba encendido.
Poco después se escuchó un disparo. El grupo de guardaparques decidió dividirse en dos para realizar una espera.
Luego de unos 40 minutos, los funcionarios apostados cerca del campamento percibieron ruidos de machetes aproximándose al lugar donde estaban. Apareció luego una persona armada que recibió la voz de alto y se entregó sin oponer resistencia.
Al hombre le incautaron una escopeta calibre 16 milímetros de dos caños, cinco cartuchos y dos aves muertas (saracudas).
El cazador fue llevado a la comisaría de San José, donde quedó alojado a disposición de la Justicia.