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Las promesas de inversiones fueron constantes desde que Mauricio Macri asumió su cargo en diciembre de 2015. Pero, por el contrario, y aunque algunas sí se concretaron, el acercamiento que tuvieron los países con la Argentina no fue el esperado. Uno de los motivos es la seguridad económica y jurídica que los inversores reclaman para venir al país.
Esta demanda, como así también el interés por invertir, fue uno de los temas planteados en el seminario Argentina Summit 2017, organizado en el hotel Alvear de Buenos Aires por la prestigiosa revista británica The Economist. “Estamos entusiasmados en volver a la Argentina, pero no tenemos ningún tratado para proteger nuestras inversiones”, se sinceró frente a Clarín el embajador de Japón en el país, Noriteru Fukushima.
Es que la Argentina no posee ninguna ley que respalde directamente las inversiones extranjeras, como si tiene, por ejemplo, países vecinos como Chile, Perú, Brasil y Uruguay. El diplomático japones explicó que “para hacer una inversión grande, se necesita una garantía soberana”. Luego agregó: “La tasa de riesgo en este país está muy alto”.
La inestabilidad económica -con una fuerte inflación y distintos tipos de cambio durante los últimos años de gobierno K- fueron algunos de los factores que alimentaron la incertidumbre en torno a aquellos interesados en traer negocios al país.
El Gobierno lo sabe y, por tal motivo, reglamentó la Ley de Participación Público Privada a fin de febrero. Macri también pidió. en la apertura legislativa, una reforma tributaria y una ley de responsabilidad empresarial. En su conjunto, estiman que ésto generará un marco de mayor confiabilidad.
A pesar de esto, hubo un amplio respaldo a las políticas adoptadas por el gobierno de Macri a lo largo del último año. “Japón tiene mucho interés por volver a invertir en la Argentina, es un país que tiene mucho potencial y es amigable para nosotros”, enfatizó Fukushima con un tono mucho más optimista durante la charla con Clarín.
Continuando en la línea de los elogios, auguró una buena relación entre ambas naciones. “Argentina es un país del futuro, que tiene mucho potencial y, además, es amigable con Japón”, lanzó.
Según detalló, es posible que se firmen múltiples acuerdos bilaterales a lo largo del año, con la prioridad puesta en el sector automotriz y el tecnológico. “Tenemos mucho que aportar”, dijo sobre éste último. Lo que sí, pidió que los contratos sean en dólares, para “mantener una seguridad cambiaria”,
Por último, adelantó lo que puede suceder cuando Macri realice la visita oficial a China y Japón en mayo. Aseguró que recibirán al presidente argentino con todos los honores, ya que la Argentina está considerada como un país “transparente y amigable”.
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