A partir del DNU establecido por el presidente Javier Milei, el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) ya no tendrá la potestad de debatir y acordar los valores de la hoja verde.
Según analizaron representantes del sector, esta medida perjudica a los pequeños productores y secaderos, cooperativas, ya que sostienen que volverán los grandes industriales a fijar precios de la materia prima, hoja verde y canchada.
El representante del Estado misionero en el INYM, Ricardo Maciel, explicó que el DNU también recorta algunas funciones y facultades del organismo, pero “lo que más importa es el tema de la fijación de precios que, de alguna manera, permite a los pequeños productores tener un piso de precios como para negociar. Y con esto quedan otra vez liberado al libre mercado. Y no existe libre mercado si hay un poder dominante concentrado, comprador, sobre pequeños productores dispersos, atomizados y sin poder de negociación”, remarcó.









