Particular experiencia teatral: cuatro personas encerradas en una casilla de tres por seis

Cuatro personas se mueven en una casilla de madera 18 metros cuadrados. Se enroscan, saltan, muestran destrezas, bailan en medio de proyecciones. Pero la escena, lejos de ser placentera, angustia. Es que el espectador sabrá, antes de empezar a involucrarse con la obra “3×6- Informe de una vivienda en emergencia“, que la propuesta artística del colectivo chileno Al Margen está basada en una situación real: la vida en las mediaguas (casillas) que arman en Chile en zonas que fueron arrasadas por desastres naturales con la idea de dar una ayuda momentánea, pero se vuelven viviendas fijas.

“Buscamos ahondar y representar las consecuencias psicológicas, físicas y emocionales que produce vivir en el hacinamiento, los efectos de convivir en un espacio de tres por seis metros“, cuentan desde Al Margen. De eso se trata esta performance que combina arquitectura, danza y artes visuales, y estará desde mañana y hasta el miércoles en el Centro Cultural 25 de Mayo (avenida Triunvirato 4444, Villa Urquiza).

Mirá también

Todos los terremotos que hubo en el mundo en 15 años, en un video

“La obra está creada desde la danza, pero con un lenguaje interdisciplinario. El director, Hugo Peña, es arquitecto y bailarín, y cuando conoció la situación de Dichato, una localidad costera de la región del Biobío que fue arrasada por el tsunami del 27 de febrero de 2010, quiso generar algo para contar el problema de vivienda de la zona. Partimos de ese lugar, pero es algo que pasa en muchos puntos de Chile”, señala una de las performers y participante del colectivo, Ximena Bascuñán. La acompañan en escena César Cisternas, Christian Cancino y Joaquín Leal.

Hace poco más de cinco años, el proyecto se puso en marcha. El colectivo Al Margen -parte de la plataforma cultural chilena LODO- se instaló varios días en Dichato y compartió el día a día en las casillas: en 18 metros cuadrados, sin separaciones ni servicios básicos, puede llegar a convivir una decena de personas. No hay vidrios en las ventanas. Los baños y duchas son espacios compartidos y limitados.

“Vimos cómo las personas afrontan un sinfín de problemas sociales, conflictos familiares, falta de privacidad. Lo que empieza siendo una solución temporal después de un tsunami, termina volviéndose la vivienda definitiva. Es un problema”, apunta la productora general del proyecto, Ximena Peña. La instalación que esta semana se presenta por primera vez en Buenos Aires reproduce el espacio original y sus dificultades: es una casilla de 3 x 6, de madera, con un colchón en el medio y varias ventanas que se vuelven las ‘butacas’ de los espectadores.

Mirá también

Bienal de Venecia: una instalación alemana se llevó el premio

La casilla es intervenida con mapping (proyección en superficies reales, más allá de una pantalla clásica), a cargo de Valentina Nazer, y una instalación sonora, en manos de Julián “Anuk” Tapia. Así, acerca testimonios de quienes sufrieron el terremoto y el tsunami y se adaptaron a la vivienda de emergencia.

“La instalación interpela al espectador ya que lo obliga a tomar una posición para apreciar la obra; pudiendo rodearla, recorrerla o intervenirla, haciéndolo partícipe y no sólo un espectador”, resumen en Al Margen. Y siguen: “Permite tomar una posición frente a la temática de la vivienda, al tener un acercamiento a una realidad social latinoamericana oculta y desconocida para la mayoría”.

“Es la primera vez que salimos de Chile y lamentablemente vemos que la problemática de la vivienda existe en casi toda América Latina. Acá, en Buenos Aires, ofrecimos un workshop, ‘Cuerpo, arquitectura e instalación, la danza y la intervención del espacio público para la reconstrucción social’, y tuvimos la oportunidad de visitar proyectos en villas, donde también hay una clara problemática de vivienda”, suma el Jefe Técnico de la iniciativa, Mauricio Muñoz. Él fue el encargado de encontrar la forma de contar con la casilla para la obra en Buenos Aires. “Traer la que usamos en Chile era muy costoso. Así que empezamos a buscar alternativas acá. Encontramos, finalmente, una maderera de Quilmes, que pudo replicar lo que necesitábamos. Esa búsqueda nos permitió conocer también otro tipo de barrios, en el Conurbano”, cuenta.

La instalación permanente de la casilla con proyección de imágenes documentales puede verse desde el lunes 15 al miércoles 17 de mayo, de 11 a 22 en el Centro Cultural 25 de Mayo. Las funciones con danza y demás elementos artísticos son esta semana, lunes y martes a las 19 y miércoles (doble función), a las 19 y a las 21. Entrada gratuita (se retiran 2 horas antes de cada función). Para más información sobre los proyectos del Colectivo Al Margen, visitá su página.