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“¿Qué hacemos chicas, lo seguimos?”, dijo Nancy a sus vecinas del barrio de Flores, convencida de que el sospechoso que habían visto deambular solo, con una bolsa blanca en la mano y “como drogado” por las inmediaciones de la villa 1-11-14 era Darío Gastón Badaraccco. Fue ella, embarazada de cuatro meses, y sus conocidas, quienes alertaron a un grupo de gendarmes y dieron el primer paso para su detención.
El sospechoso de haber asesinado a Araceli Fulles estaba prófugo desde el viernes a la mañana, después de que encontraran el cadáver semienterrado en una casa de José León Suárez. “Yo tenía su cara grabada de verla todo el día en la tele”, contó la vecina que lo reconoció, sentado frente al edificio de una escuela.
Los efectivos de la Unidad 34 de Gendarmería junto al detenido Darío Gastón Badaracco.
La detención no fue inmediata, según Nancy. “Mi amiga le dijo al gendarme ‘está ahí el sujeto que mató a Araceli’, y la Gendarmería le dice a ella ‘dejame tus datos’. ‘No, ¿por qué tengo que dejarle mis datos? Corra a agarrar al sujeto antes de que se escape”, relató sobre la conversación con los efectivos.
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Según informó a la agencia DyN el segundo comandante del Cinturón Sur de Gendarmería, Jorge Daniel Solan, Badaracco tenía “un par de prendas al lado de él, estamos tratando de determinar de quién eran”. Tras compararlo con el identikit, fue detenido sin oponer resistencia. Tanto él como la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmaron que fue clave el aviso de una vecina.
Una de las fotos que circularon por las redes sociales y la tele cuando Darío Badaracco estaba prófugo.
“Yo había visto a la madre de Araceli en el noticiero y la vi muy mal, muy triste. Yo también soy madre de dos nenes de 11 y de un año y medio, y estoy embarazada. Cuando lo vi a la cara me largué a llorar”, relató Nancy.
Los afiches de búsqueda con la cara de Araceli Fulles siguen pegadosen todo San Martín.
Badaracco, de 29 años, casado y padre de dos hijos, había declarado tres veces antes de darse a la fuga como testigo por la desaparición de Araceli Fulles. Según él mismo dijo a la fiscal Graciela López Pereyra, fue el último que la vio con vida y hasta afirmó haber tenido relaciones sexuales con la joven de 21 años de San Martín. Pese a eso, no fue detenido.
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El sospechoso se fugó cuando allanaban su casa, según creen con complicidad de sus compañeros de trabajo en un corralón de San Martín, algunos de los cuales están detenidos.
Ayer y hoy, en las redes sociales grupos de feministas, familiares Araceli y miles de usuarios multiplicaron en la Web la foto de Badaracco.
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