El lugar donde descansa el astro argentino se encuentra sin la lápida que sus hijos le pusieron el día del entierro.
Hasta el momento nadie sabe qué ocurrió, ya que una de las posibles teorías es que el objeto puede tener mucho valor en el mercado y por eso fue robada.

Sin embargo, otro rumor expresa que la familia de Diego Armando, más precisamente sus hijos, notaron que la tumba de su padre se volvió un santuario para sus fanáticos y muchos se acercaban a tomarse fotos. Esto se volvió un fenómeno de redes sociales y habrían tomado la decisión de retirarla.