Con un salón de usos múltiples lleno del edificio Juan Figueredo (Colón 2368), el Foro convocado por el Área Pedagógica de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Misiones, arrancó en su primera jornada con un centenar de participantes de los diferentes claustros (estudiantes, graduados, docentes y no docentes).
El Mgter. Rubén Zamboni, Vicedecano de la Facultad, expresó que “el primer semestre nos encuentra a los estudiantes y docentes en una situación muy particular debido a que un cambio de gestión a nivel nacional significó expectativas en torno a lo presupuestario, angustias, en torno a la universidad y que va a pasar con el concepto de educación pública”.
También en este primer encuentro, el docente investigador en políticas educativas y actual Director del Área Pedagógica Prof. Miguel Franco, describió la situación presupuestaria de la Universidad Nacional de Misiones tras el “levantamiento del cepo cambiario” y con la inflación actual.
En este sentido, Franco expresó que “el presupuesto de la UNaM a noviembre del pasado alcanzaba los 816 millones de pesos, lo que significaba 83 millones de dólares. Hoy ese mismo presupuesto significa 56 millones de dólares, según cotización oficial $14,36. Es decir, la Universidad ´pierde 37 millones de dólares. Lo que significa que el presupuesto dejó de ser 816 millones de pesos para pasar a ser 506 millones de pesos”, concluyó el académico.
Más adelante y en esta línea, Franco manifestó que “hoy el presupuesto representa 62 por ciento de esa cifra porque cayó un 38 por ciento al mes de enero por la depreciación del valor. Hay una pérdida de recursos presupuestarios en la Universidad Nacional de Misiones que alcanza los 310 millones de pesos”.
Retenciones
En su exposición también Franco le dedicó algunos minutos a la cuestión de las retenciones. “Las retenciones significaban el 10 por ciento del presupuesto nacional, alcanzaban más de 135 mil millones de pesos, lo que en dólares representan unos 9 mil 469 millones de dólares. Para tener una idea, el total del Presupuesto total de Educación, Cultura y Deporte, ronda los 122 mil millones de pesos, de los cuales 51 mil millones de pesos se destinan a universidades nacionales. Esto significaba que con una sola medida se desfinanció un área porque son recursos con los que el Estado nacional no cuenta más”.
Franco agregó que “para tener una dimensión, nosotros teníamos un presupuesto total en Educación y Cultura de 122 mil millones de pesos lo que representaba un 5, 4 por ciento del PBI (Producto Bruto Interno) y un crecimiento del 28,2 por ciento con respecto del año pasado. En ese sentido, esa progresividad se va a licuar cuando comienza a regir el cepo respecto al dólar, eso en una sola medida significó que el presupuesto de 83 millones de dólares automáticamente, pasará a 56 millones de dólares. Es decir que el recorte está dado por medidas complementarias no por medidas directas. En términos reales, lo que tenemos es el 62 por ciento del presupuesto vigente asignado a nuestro presupuesto, o sea una depreciación del orden del 38 por ciento menos al mes de enero. Los números son los mismos pero la depreciación y devaluación es esa”.
El docente recordó que “las medidas macroeconómicas son las que reestructuran este proceso de desfinanciamiento real” y agregó que “el presupuesto financia los salarios, que por ley manda que no se pueden destinar más que 85 por ciento de los recursos generales a salarios y no al revés. Es decir, esta depreciación de los recursos implicará el congelamiento de cargos docentes, del crecimiento territorial, de las becas de estudio, albergues, comedor e investigación, de compra de bibliografía e insumos para los programas de investigación y extensión.
Lxs participantes coincidieron en la necesidad de sostener espacios de discusión como estos, y avanzar en un cronograma de actividades similares así como en una agenda común en la comunidad universitaria que alcance a todas los claustros. Para ello se convocó al próximo lunes 29 de mayo a las 16 hs en el mismo espacio, a todxs los claustros y agrupaciones de la facultad para avanzar en la construcción de una agenda y dinámica de trabajo común sobre las inquietudes que surgieron en esta primera instancia: presupuesto educativo universitario, condiciones pedagógicas, entre otros puntos.
Gremios docentes
Durante la apertura de este foro, también se pudo escuchar a los referentes gremiales de ADUNaM y UDUM, que son los gremiso que representan a los trabajadores docentes en la universidad misionera.
La delegada suplente de la Asociación de docentes Universitarios de la UNaM (ADUNaM, gremio de base de ConaduH) expresó su preocupación por la cuestión presupuestaria de las universidades nacionales y manifestó la necesidad de discutir la cuestión presupuestaria más general que hace a la calidad educativa y no se agota en la cuestión salarial docente. “En la carrera de Comunicación Social por ejemplo, tenemos solo dos docentes titulares para 40 materias y dos carreras”, relató Tania Piris Da Mota.
Agregó que “en la UNaM hay precarización que se materializa en contratos. No hay concurso ni todo lo que se exige para ingresar a la carrera docente tal como lo establece el Convenio Colectivo de Trabajo y que debería garantizar calidad educativa en las universidades públicas nacionales”.
Desde la Asociación gremial docente UDUM (asociación de base de FEDUN) se denunció que tras el cambio de gestión, no solamente hubo un cambio en términos presupuestarios sino también simbólicos.
El docente Hernan Cazzaniga, integrante de la Comisión directiva relató que “el estado nacional estaba obligado a convocar a las universidades públicas para la toma de decisiones en la ejecución de diferentes programas y políticas. Sin embargo esto no ocurrió por la caída de convenios. Entonces no solamente es el recorte presupuestario sino que además, nos quedamos sin la posibilidad de acceder a diferentes investigadores y otros recursos que no estaban incluidos en los presupuestos”.
Según el docente “esa reestructuración de convenios, esa caída de convenios implica 3 millones de pesos menos que fueron reasignados a las universidades privadas y que implicó quitarles el rol a las universidades públicas”.