El incidente se produjo pasadas las 23 al momento en que las alarmas del Airbus 330 comenzaron a sonar. La aeronave había despegado minutos antes rumbo a Estados Unidos. Cuando aterrizó, lo hizo con normalidad.
La compañía aún no publicó ningún comunicado sobre el asunto, pero el vuelo fue reprogramado para la madrugada.
El aterrizaje del avión fue seguido muy de cerca en la pista por bomberos y ambulancias. La situación obligó a que se cerrara por completo la pista de Ezeiza durante varios minutos.
El aterrizaje fue exitoso y los casi 300 pasajeros bajaron si problemas. El avión quedó fuera de servicio.