El cabo del Ejército, Michael Natanahel Verón, de 26 años, permanece internado desde el sábado con la columna vertebral lesionada, con una durísima operación a cuestas y aún sin saber si podrá volver a caminar.
En las últimas horas del lunes debió recibir asistencia mecánica respiratoria, mientras espera la llegada de una prótesis para la próxima cirugía. No se descarta el riesgo de muerte, según manifestaron voceros de la fuerza.
Cabe recordar que todo ocurrió en el Regimiento de Monte 30 de Apóstoles durante otra ceremonia o “ritual de iniciación” o bautismo”, cuando el misionero graduado como suboficial del Ejército fue presuntamente arrojado a una pileta sin agua y sufrió la rotura de dos vértebras que le aprisionaron la médula.
Por el hecho, fueron relevados de la cúpula del Regimiento involucrado el teniente coronel Patricio Trejo, el segundo jefe mayor Sebastián Notaro y el encargado de la Unidad, suboficial mayor Ireneo Suárez.
A nivel nacional, el ministro de Defensa de la Nación, Jorge Taiana, se manifestó el domingo en una radio porteña y repudió lo acontecido en Misiones. Sostuvo que “esto del bautismo” en los cuarteles “no va más”.
“Es un soldado voluntario que pasó a cabo y ha sufrido graves lesiones”, agregó el funcionario y lamentó: “Hay todo un movimiento de rechazo a los bautismos, va a haber sanciones. Es algo claramente prohibido y hay una desobediencia. Habrá relevo de los jefes de unidad. Actuaremos con dureza y firmeza”.