El Presidente decidió apartar de su cargo al titular de Infraestructura luego de la filtración de información interna. Había roces anteriores que ya tensaban la situación.
El clima de la reunión de gabinete de este jueves en Casa Rosada fue muy tenso. El presidente respaldó a Luis Caputo ante el resto de sus ministros y lanzó una dura frase que este jueves por la noche desembocó en la salida del ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro.
“Los voy a dejar sin un peso”, dijo y repitió el Presidente, en referencia a los mandatarios provinciales.
Esa frase, que se difundió en las últimas horas, surgió en respuesta de los dichos del titular de Economía, que lanzó ayer una dura advertencia a los gobernadores al anticipar que si sus diputados no acompañan la aprobación de la Ley Ómnibus, se acabarán las partidas discrecionales del Poder Ejecutivo Nacional a las provincias.
El ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, fue apartado de su cargo este jueves por la noche. Si bien lo de esta mañana fue la gota que rebalsó el vaso, según trascendió, el Presidente Javier Milei se habría molestado por diversas filtraciones de información que el funcionario habría brindado a la prensa sin autorización sobre las reuniones de Gabinete.
El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, provocó rispideces al interior del equipo de Gobierno cuando ubicó a Mauricio González Botto a cargo de la Secretaría de Empresas y Sociedades del Estado, un sector orquestado -en teoría-, por la cartera de Infraestructura que dependía de Ferraro.
“El ministro recientemente desvinculado había iniciado planes de inversión privada para la obra pública en reuniones con cámaras empresariales y sindicatos. También tenía a su cargo el área de transporte que lo obligaba a tener diálogo permanente con los gobernadores”, explicó el periodista Manuel Jove, al aire de TN.
Ferraro fue elegido por Milei como el ministro de Infraestructura a partir del 10 de diciembre. Es contador público y hasta hoy estuvo a cargo del ministerio que tiene cinco secretarías, entre las que se encuentran Energía, Transporte, Obras Públicas y Vivienda, Comunicaciones y Conectividad, y Minería.
El ahora exministro de Infraestructura ya había cumplido funciones públicas en el pasado. Fue Subsecretario de Industria de la Nación entre los años 2002 y 2003, y luego de la crisis de 2001 trabajó en el banco regional Bisel, que luego fuera vendido a la banca privada nacional.
Esa no fue su única relación con la política. El licenciado en administración de empresas de la UBA fue presidente del CEAMSE durante el periodo 1997-2001, se desempeñó como Subsecretario de Informática y Telecomunicaciones de la Provincia de Buenos Aires, fue jefe de asesores de Antonio Cafiero en el Senado y también participó de la Convención Constituyente.