En la carta, los senadores de la Nación explicitaron su solicitud de no modificar sus sueldos “hasta tanto se determine un nuevo sistema de liquidación en función de los varios proyectos que se encuentran pendientes de tratamiento en relación a este asunto”.
En respuesta a la controversia generada por un aumento del 9% en sus dietas, los senadores de la Nación decidieron revertir esta medida. A través de una nota firmada por todos los jefes de bloque y enviada a la vicepresidenta Victoria Villarruel, los legisladores pidieron cobrar en junio lo mismo que en el mes anterior, dejando en suspenso el incremento que habría llevado sus dietas a $8.000.000.
De haberse concretado el aumento del 9%, las dietas habrían ascendido a $8.000.000 brutos por mes, lo que se traduciría en un salario neto de $5.000.000.
Una votación polémica en el Senado
El mes pasado, una votación poco clara en el Senado generó revuelo al aprobarse una resolución que habilitaba el aumento de las dietas. En esa ocasión, el incremento fue aprobado sobre el final de la sesión y en apenas un minuto, con una votación a mano alzada por más de tres cuartos del recinto. La resolución establecía que, a partir de mayo, los senadores de la Nación percibirían un total de 13 dietas anuales, cada una equivalente a 2.500 módulos, más un adicional de 1.000 módulos por gastos de representación y 500 módulos por desarraigo.
Críticas y oposición interna
El debate sobre el aumento en las dietas no estuvo exento de críticas y oposición interna. En abril, cuando se discutió el aumento, surgieron desacuerdos en La Libertad Avanza, y varios miembros de la oposición expresaron su descontento. Francisco Paoltroni, quien estuvo ausente en la polémica votación, manifestó su rechazo: “Personalmente me dio mucha vergüenza. Hay muchos que tratan de confundir, de mezclar todo y de convertirte en casta en 55 segundos”, comentó.
En medio de las críticas y la controversia, los senadores decidieron solicitar la reversión del aumento de sus dietas. Este gesto busca mitigar la reacción pública y reevaluar el sistema de liquidación de sus sueldos, en espera de una solución que contemple los diversos proyectos aún pendientes de tratamiento.
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