El sur de Brasil, en especial los estados de Rio Grande do Sul, Paraná y Santa Catarina, limítrofes con Misiones, despertó este miércoles con temperaturas bajo cero y heladas en diversas localidades, dejando un panorama invernal en pleno noviembre.
La llegada de una masa de aire frío, impulsada por un centro de alta presión, generó un descenso térmico que afectó de forma pareja a toda la región durante la noche del martes y alcanzó mínimos inusuales en Brasil durante la madrugada.
En Santa Catarina, las estaciones meteorológicas registraron las temperaturas más bajas de la jornada, con mínimas de -0,3ºC en São Joaquim, -0,4ºC en Panel, -0,5ºC en Urupema, 1,0ºC en Vargem y 1,2ºC en Urubici. En Rio Grande do Sul, estaciones automáticas privadas reportaron 1,0ºC en São José dos Ausentes, 1,7ºC en Pinheiro Machado, 2,5ºC en Vacaria, 3,3ºC en Soledade y Cambará do Sul, 3,6ºC en Cabo Bonito do Sul, y 3,7ºC en André da Rocha.
Paraná también experimentó un amanecer frío para esta época, registrándose 4,7ºC en General Carneiro y 6,7ºC en Ignacio Martins, según datos de estaciones del Instituto Nacional de Meteorología (Inmet).
Las temperaturas mínimas extremas de este miércoles en Rio Grande do Sul y Santa Catarina, cercanas a 0ºC o inferiores, fueron registradas en su mayoría en áreas de tierras bajas y en valles. Este fenómeno ocurre en lugares donde el aire frío, al ser más denso, se desplaza hacia las áreas más bajas, una dinámica explicada por el sitio especializado MetSul: “Cuando la masa de aire frío llega con viento, los puntos altos registran los mínimos, como ocurrió ayer. Sin embargo, cuando esta masa de aire frío se estabiliza, los valles y tierras bajas tienden a tener los mínimos, ya que el aire frío drena hacia las zonas más bajas de la superficie”.