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“Otra misión exitosa, estoy orgulloso de nuestros militares”, afirmó esta tarde el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al referirse al lanzamiento de la llamada “madre de todas las bombas” contra posiciones de la banda terrorista ISIS en zonas montañosas de Afganistán.
El mandatario también hizo hincapié en que el ejército estadounidense tiene su “plena autorización” para actuar, es decir “una carta en blanco”.
Estados Unidos lanzó la bomba más poderosa de su arsenal, denominada la “madre de todas las bombas”, sobre un refugio del ISIS en suelo afgano. Según informó el Pentágono. las fuerzas estadounidenses lanzaron la bomba sobre un objetivo del grupo terrorista. El vocero del ministerio de Defensa de EE.UU., Adam Stump.Stump dijo que es la primera vez que la bomba, conocida como GBU-43 y que contiene 11 toneladas de explosivos, se lanza en combate.
Se trata de la mayorbombano-nuclear con la que cuenta en su arsenal, conocida como “la madre de todas lasbombas”, según la calificó el Pentágono. Estados Unidos informó además que el ataque aéreo estuvo dirigido contra un túnel y combatientes de la milicia terrorista.
En una conferencia de prensa, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo que se tomaron los recaudos necesarios para evitar víctimas civiles. El vocero no quiso responder la consulta de si el presidente Trump ordenó personalmente el ataque. “Estados Unidos se toma muy en serio la lucha contra el ISIS y para derrotar al grupo tenemos que privarlos de espacio operativo, que es lo que hicimos”, señaló.
La cadena CNN dijo que labombade casi 10.000 kilogramos es guiada por un sistema GPS y es la mayor del arsenal estadounidense. Solo Rusia cuenta con unabombamás grande que esta. El objetivo era minimizar el peligro de los soldados estadounidenses y afganos en la región y maximizar el daño a los terroristas, aseguró el Pentágono. Las fuerzas estadounidenses están evaluando actualmente cuáles fueron los daños provocados por el ataque.
El Pentágono indicó que los rebeldes están fortaleciendo sus líneas de defensa con explosivos improvisados, túneles y búnkers.
“Esta es la munición indicada para despejar estos obstáculos del camino y mantener el impulso de nuestra ofensiva contra el ISIS”, señaló el comandante de las tropas estadounidenses en Afganistán, el general John Nicholson. La banda terrorista llegó a Afganistán en 2015 y se estima que tiene unos 3.000 combatientes en ese país. Durante mucho tiempo solo tuvo presencia en las provincias de Nangarhar y Kunar, en el este. Desde hace meses, las fuerzas afganas y las estadounidenses lanzan ataques aéreos contra posiciones de la milicia yihadista en la región.
Los expertos temen que los combatientes del ISIS busquen una nueva base en Afganistán y Asia Central en su huida de Irak y Siria. Este será uno de los temas que se tratarán mañana en una conferencia sobre Afganistán en Moscú.
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