Mauricio Marionsini, el ex prefecto que estaba prófugo por asesinar a su mamá y a su padrastro por celos, fue detenido en cercanías a la terminal de ómnibus Mariano Moreno tras un llamado clave al 911 de un vecino que lo reconoció.
El hombre de 33 años era intensamente buscado por los crímenes de Tamara Marionsini (53) y Silvio Rubén Martini (65) el sábado 20 de enero en la vivienda de su mamá.
Según confirmaron fuentes del caso, cuando los efectivos policiales se acercaron hasta Mauricio, este mismo les confirmó su responsabilidad: “Yo los maté”.
La denuncia fue realizada en la jornada del martes cuando un hombre advirtió al 911 que reconoció al sujeto que había matado a su mamá y a la pareja gracias a la difusión masiva del rostro del asesino.
El denunciante indicó que el ex prefecto se encontraba a bordo del colectivo de la línea 141 y cuando se bajó fue interceptado por personal policial.
Desde la Justicia informaron que Marionsini no opuso resistencia y allí confesó: “Yo los maté. Ustedes no tienen la vida que me tocó vivir a mí”.
Aunque carece de validez legal, se trata de un punto importante para avanzar en la causa y se espera que frente al fiscal del caso, Alejandro Ferlazzo, pueda declarar.
Para el fiscal la hipótesis principal es que cometió los asesinatos por un móvil económico por una deuda que tenía, sin embargo habría otra cuestión detrás.
Es que cuando la División Homicidios de la Policía de Investigaciones comenzó a tomar testimonios sobre lo que pudo haber ocurrido, los vecinos mencionaron que el ex prefecto y papá de mellizos de 11 años estaba celoso y enojado porque su mamá se iba a casar.
Además, señalaron que en reiteradas oportunidades Marionsini amenazó a la víctima, quién seis meses atrás había superado un cáncer, y hasta llegó a golpearla.