Irma Ferreyra Da Rocha era madre de siete hijos y , trabajaba como empleada doméstica en dos casas así como en la feria “La Salada”.
Quienes la conocían, afirmaron que “se desvivía para llegar a fin de mes”.
El 17 de diciembre de 2016 por la noche asistió a una despedida de fin de año organizada por sus compañeros puesteros. Nunca regresó a su hogar y la familia perdió contacto telefónico con ella.
Al día siguiente comenzaron a buscarla. Finalmente, a las 11 de la mañana, Mabel Ferreyra Da Rocha conoció la peor noticia: durante la madrugada, habían hallado a su hermana en el túnel de un descampado ubicado en Garupá. Había sido violada, torturada y asesinada.
Irma se había ido de la reunión con un hombre de 47 años, quien fue detenido junto a un posible cómplice, de 27, identificado como Leonardo E., alias El porteño.
El porteño sorprendió a todos días después con su declaración ante la Justicia, al admitir la participación en el hecho, asegurando incluso “que fue consentida”.