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A casi un año del escándalo, que marcó un hito en la historia de la corrupción en el país, la Iglesia se encamina a desactivar el infelizmente famoso monasterio de General Rodríguez donde cayeron los bolsos con casi nueve millones de dólares que revoleó el ex secretario de Obras Públicas de Cristina Kirchner, José López. La decisión -que abarca a toda la comunidad religiosa a la que pertenece el convento- ya fue tomada por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani, en acuerdo con el Vaticano, según pudo saber Clarín.
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De todas formas, fuentes de la curia de Mercedes – Luján señalaron que la decisión no se tomó porque la comisión eclesiástica investigadora que se creó semanas después del hecho detectó complicidad de las monjas con el intento de ocultar el dinero, sino por falta de miembros e incumplimiento de requisitos estatutarios de la comunidad. Con todo, trascendió que las cuatro religiosas que viven allí, por razones humanitarias, no serán trasladadas inmediatamente a otro sitio. Pero se descuenta que el destino final del lugar será alguna obra de la Iglesia.
Daniel Rafecas inspeccionó en julio de 2016 el convento de General Rodríguez: "Se secuestraron documentos que muestran una relación previa con José López"El magistrado recorrió el monasterio donde el ex secretario de Obras Públicas intentó esconder casi US$ 9 millonesEL JUEZ RAFECAS EN EL MONASTERIO DE GENERAL RODRIGUEZ.FOTO ORTIZ GUSTAVO 20-07-16 buenos aires daniel rafecas juez caso lopez recorrida monasterio convento general rodriguez caso lavado dinero k ex secretario obras publicas corrupcion
Técnicamente lo que hará el arzobispado es anular la asociación privada de fieles -la figura canónica (eclesiástica) que le daba existencia jurídica dentro de la Iglesia y ante el Estado nacional- correspondiente a las Monjas Orantes y Penitentes de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, lo que implica desactivar el monasterio. La asociación fue impulsada y aprobada en los ’90 por el entonces obispo de Avellaneda, monseñor Rubén Di Monte, a la postre arzobispo de Mercedes – Luján, que vivió en el monasterio hasta su muerte, dos meses antes del episodio de los bolsos de López.
Precisamente, Di Monte -un obispo muy conservador, de gran facilidad para relacionarse con el poder y condiciones para procurar fondos- trabó una fluida relación con el ministro de Infraestructura de Néstor Kirchner, Julio De Vido. El interés que llevó inicialmente a Di Monte a construir el vinculo fue obtener fondos para la terminación de las obras de restauración de la basílica de Luján, que cuando Kirchner llegó a la presidencia ya estaba bajo su jurisdicción. La relación se extendió a José López, el secretario de Obras Públicas.
Un video mostró a José López con bolsos llenos de dinero y las monjas lo ayudan a entrarlos al convento.
El vínculo creció tanto que De Vido, López y otros conspicuos kirchneristas comenzaron a frecuentar el monasterio y compartir comidas. Precisamente, a ese vínculo -dicen en la curia- apeló López cuando en la fría madrugada del 14 de junio se sintió acorralado -aunque no se sabe exactamente por quienes- y quiso ocultar en el monasterio los casi nueve millones de dólares que tenía escondidos en su casa de Tigre.
Pero un vecino se percató de movimientos extraños en torno al convento y llamó a la policia, quien sorprendió in fraganti al ex funcionario con lso bolsos y una carabina. Acutalmente, está preso, procesado por enriquecimiento ilícito y tenencia de ilegal de armas.
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