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“Voy a ser diputada de toda la Nación por la ciudad de Buenos Aires”. Con esta definición la actual diputada nacional Elisa Carrió confirmó que volverá a competir electoralmente por Cambiemos y, aunque lo subordinó a una última definición, ya empezó a proponer tres nombres de la Coalición Cívica para integrar la lista.
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Más allá de prodigar múltiples elogios al presidente Mauricio Macri y al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, con quienes dijo haber “llegado a un acuerdo”, no dudó en disparar munición gruesa contra una extensa lista de dirigentes de Cambiemos. De la gobernadora María Eugenia Vidal y sus funcionarios Cristian Ritondo, ministro de Seguridad, y Pablo Bressi, jefe de Policía Bonaerense; a Ernesto Sanz, ex presidente de la UCR y uno de los tres socios fundadores de Cambiemos. De la vicepresidenta Gabriela Michetti, al intendente de Vicente López, Jorge Macri. Jaime Durán Barba, el asesor y estratega electoral de Macri, y hasta el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, cayeron bajo las críticas ácidas de Carrió.
En medio de sus críticas a los dirigentes, advirtió en una entrevista con el programa A Dos Voces, de Todo Noticias que le “molestan las operaciones políticas que hacen sectores internos del propio PRO” contra ella y se quejó porque, ahora, sufre un ataque “peor” que cuando esta el gobierno de Néstor y Cristina Kirchner. “Pensé que se iba a terminar toda la embestida en el gobierno de Cambiemos y es peor. Es peor el ataque personal, quizás porque estoy alta en imagen“, aseguró.
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También renovó la embestida contra el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, contra la ex presidenta Cristina Kirchner, Aníbal Fernández, Julio De Vido y una larga lista de ex funcionarios. Martín Lousteau, eventual adversario suyo en las próximas elecciones no escapó a la dialéctica filosa de la diputada.
“Voy a ser diputada de toda la Nación por la ciudad de Buenos Aires”, afirmó Carrió y, al ser consultada sobre si era una decisión política tomada, aclaró: “si me da el físico sí”. Resaltó que la candidatura “es una decisión colectiva que incluye a dos personas: al presidente, a Horacio Rodríguez Larreta y a nadie más“.
Aunque no dio más detalles del contenido de ese acuerdo, sí nombró a tres dirigentes de la Coalición Cívica que, para ella, “tienen el mérito y el derecho de ocupar una banca para seguir representando esta causa”. Así, nombró a su mano derecha Fernando Sánchez, que tiene mandato de diputado hasta fin de año, y los dirigentes Maximiliano Ferraro y Paula Olivetto. “Va a ser una lista ejemplar”, adelantó.
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De todos modos, interpretó como “una operación” que se hable de Diego Santilli como cabeza de lista y ella en segundo lugar y redobló la apuesta: “Hay gente que está provocando mi destrucción, yo ya estoy lista y me siento muy acompañada por una parte muy importante de la Nación, por mucha gente de Cambiemos, del radicalismo y del PRO”.
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