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Parece que el tiempo no hubiese pasado desde esa trágica noche del 16 de febrero de 2013 en Panamericana. “Esperaba que se vaya a la cárcel con esposas”, dijo Rodrigo Rodas, de 18 años, apenas salió del Tribunal Oral N° 6 de San Isidro. Allí este viernes escuchó la sentencia de 4 años para Pablo García Aliverti, que atropelló y mató a su padre, Reinaldo Rodas, mientras andaba en bicicleta por la autopista.
García Aliverti, hijo del periodista Eduardo Aliverti, condujo 17 kilómetros con el cadáver de Rodas atravesado en el coche. Pero quedará libre hasta que la sentencia quede firme.
El vigilador quedó con la cabeza sobre el asiento del acompañante y las piernas trabadas entre el capó y la palanca de cambios. García Aliverti lo embistió en el kilómetro 52 después de haber pasado toda la noche en una fiesta en la localidad bonaerense de Pilar. Rodas, quien iba en bicicleta a su trabajo como vigilador del country Mapuche, murió en el acto.
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Catalina Martínez, la viuda de Rodas, llegó con su hijo temprano al Tribunal de San Isidro. Igual que el acusado. Pero a diferencia de él, Martínez sí se mostró conmovida luego de enterarse de que García Aliverti seguirá libre. A ella no le permitieron entrar a la sala de veredicto.
“Cuatro años son mucho tiempo. Ya no queremos esperar mas a que se haga Justicia. García tiene que pagar por lo que hizo”, le dijo a Clarín la mujer.
“Tranquilo no estoy. Me hubiese gustado que tengan los huevos para pedirme perdón”, siguió Rodrigo. García Aliverti es culpable de homicidio culposo agravado, con condena de cuatro años de prisión y ocho de inhabilitación para conducir. Sin embargo, seguirá libre hasta que la sentencia esté firme.
La defensa de García Aliverti, en tanto, había pedido su absolución por considerar que no pudo probarse que manejaba alcoholizado, pero sí que el vigilador circulaba por el segundo carril de la Panamericana, donde está prohibida la tracción a sangre, sin utilizar señales refractarias que permitieran verlo a la distancia.
La fiscal, María Inés Domínguez, no pidió que el antes imputado quede detenido. La querella que representa a la viuda de Rodas, en cambio, había solicitado 15 años de prisión por el delito de homicidio simple con dolo eventual.
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