Se trata del piloto de Puerto Piray, Lucas Torres, quien ganó en el TC4000 y ni bien se bajó del auto, en plena técnica del autódromo y con el casco puesto, se comprometió con su novia Mariana Vogel.
Torres ganó de punta a punta la última final del TC 4000 y su equipo se acercó a festejar a la zona de la técnica. La emoción de Lucas fue hasta las lágrimas porque tuvo un año muy bueno y no podía terminar de redondear. La victoria fue un desahogo para él y para el equipo que atiende su auto, el Torka Racing. También hubo una persona que siempre estuvo a su lado, Mariana Vogel, con quien Lucas lleva cuatro años de noviazgo y hace un año están conviviendo en Posadas. Mariana vivió en carne propia cada ilusión y cada desilusión de Lucas en el último año.
Lucas abrazó a su papá, su mamá como en cada carrera cumpliendo el ritual y salió corriendo para ir hasta donde estaba ella y sin sacarse el casco, ni los guantes, se arrodilló y le pidió casamiento al amor de su vida.
Claro que faltaba el anillo para sellar el compromiso. Pero el Grúas Torres Competición, que es el equipo familiar de Lucas, tenía previsto otra sorpresa: una arandela metálica selló la unión.
“Lo venía pensando hace varias carreras, inclusive lo hablamos en casa, pero cada vez que pensaba que se podía dar yo tenía algún problema en el auto y no se daba la victoria y volvíamos triste y ella siempre me aguantó todo. Fuimos al recital de Abel Pinto y pensé en pedirle ahí, pero me agarró cagazo”, dijo entre risas.
“Y ahora se dio la victoria, fue un desahogo y en la vuelta de honor cuando estaba llorando me decidí y dije ‘hoy es el día’. Ella me aguantó todo los buenos y los malos momentos y teníamos que cerrar el año así con una victoria y con el compromiso de casamiento”, contó Lucas sobre el momento en el que resolvió pedirle casamiento a Mariana.
“Fue sorpresa de principio a fin totalmente inesperado, siempre hablábamos de cómo sería casarnos algún día y así. Pero no imaginé que la propuesta llegaría este finde con el triunfo de Lucas”, confesó Mariana, quien cultiva el perfil bajo y siempre acompaña a Lucas en todas las carreras.
“Fue muy emocionante verlo como manejó y ganó de punta a punta. Nos estábamos preparando para festejar con toda la familia. Fuimos a la técnica como siempre y yo siempre me quedó a un costado filmando todo y de repente veo y me señala y veo que viene corriendo para donde yo estaba y cuando llega lo miro y estaba llorando de la emoción y se me arrodilló y no podía creer, esos segundos fueron un sueño, no podía creer y se escuchaba como todo el mundo empezó a gritar, nuestras familias y las familias de los otros pilotos se sumaron y fue una gran emoción que no hay palabras para describir ese momento”, contó Mariana, quien reconoce estar viviendo un sueño.
La temporada 2023 vendrá para Lucas y Mariana con cambio de equipo y dejarán el equipo de los solteros para compartir su pasión por los fierros, casados y unidos por el amor.
El Territorio