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Lo cuenta la historia: las Eliminatorias de Sudamérica son una puerta factible de abrir para que sus diez integrantes cumplan el deseo de acceder a una Copa del Mundo. De hecho, nueve de los diez seleccionados ya participaron de la máxima cita universal. Y Venezuela -el único que aún no transformó su deseo en hechos- dio muestras de que ya no está tan lejos: en el recorrido previo a Brasil 2014 quedó a un escalón del Repechaje que condujo a Uruguay -con el Fantasma del 50 a cuestas- al Mundial.
Hay una razón que incide que hace de las Eliminatorias de Conmebol las más parejas y a la vez las más abiertas del mundo: otorgan cuatro plazas directas y un lugar en el Repechaje entre diez integrantes regionales. La sensación frecuente es que no hay eliminados de antemano. Y que aún los seleccionados menos tradicionales o menos exitosos en la historia representan dificultades. La altura de La Paz o las dificultades de Quito -la ciudad donde “la pelota no dobla”, al decir de Daniel Passarella- son escollos insoslayables que todos deben atravesar. También está el calor que ofrece Colombia en Barranquilla.
Por supuesto, también pesa la jerarquía de los participantes. Hay tres campeones del mundo (Brasil, Argentina y Uruguay) y ocho de los diez (las excepciones son Venezuela y Ecuador) conocen el sabor dulce de la conquista de la Copa América, la más antigua de las competiciones continentales.
El ranking de la FIFA también ofrece otro elemento: los 10 equipos están actualmente en el top 100. Y siete de ellos se encuentran en los primeros 22 puestos. Considerando que en Rusia 2018 habrá 32 seleccionados, esos siete demuestran -con sus resultados- que están a la altura. Ellos son Argentina (1 y Equipo del Año en 2016), Brasil (2), Chile (4 y bicampeón de América), Colombia (7), Uruguay (9), Perú (18) y Ecuador (22).
La actual edición -además- se permitió y permite una osadía: poner en riesgo la clasificación de la Argentina de Messi para la Copa del Mundo. El equipo de Edgardo Bauza está quinto, en zona de Repechaje, apenas un punto arriba de Colombia, y uno por debajo de Chile y de Ecuador. Brasil (27) y Uruguay (23), que se enfrentan en esta fecha 13 en Montevideo, parecen más cómodos en lo alto.
Hay otro factor en la cuestión. Por pedido de la Conmebol se modificó el fixture. Guillermo Durán -Director del Instituto de Cálculo de la UBA- fue el encargado, junto a su equipo de trabajo, de las variantes. Se las explica a Clarín: “Lo que nosotros hicimos es diseñar un sistema que garantiza que en toda doble-ronda cada país juega un local y un visitante. Mostramos primero que eso era imposible con el viejo formato espejado (la segunda mitad era exactamente igual que la primera, solo invirtiendo las localías), y propusimos un formato “casi espejado” que permite cumplir lo de 1L-1V en cada doble ronda”.
Agrega: “Lo otro que armamos con nuestro formato es que ningún país tenga una doble-ronda con Argentina y Brasil, para no matarlos en esa seguidilla. Cumple con la característica de ser un fixture totalmente balanceado. Este concepto esta estudiado en la literatura y quiere decir que al terminar cada fecha ningún equipo le lleva en cuanto a partidos de local mas de uno a ningún otro equipo. Esto no lo cumple casi ningún torneo en el mundo, hasta lo que yo se sólo el ingles tiene esta propiedad. Es una propiedad que ayuda a que las posiciones se mantengan todo el tiempo lo más equilibradas posibles, porque nadie saca ventajas en lo que hace a las localías“.
Otra particularidad adicional que tiene este nuevo formato -cuenta Durán- es que se balancean las secuencias L-V y V-L de los equipos en cada doble ronda. Los equipos prefieren jugar L-V porque llegan a su país, juegan de local, viajan a jugar afuera y ya se vuelven a Europa (mientras que si juegan V-L hay un viaje adicional). Sirve un detalle que lo explica comparativamente: en tiempos de Julio Grondona -vicepresidente de FIFA y hombre fuerte en la Conmebol- con el viejo fixture Argentina jugaba las nueve veces L-V mientras que Brasil jugaba las nueve veces V-L. Pequeñas ventajas imperceptibles que ya no están. Hoy todos tienen 5 L-V y 4 V-L, o 4 L-V y 5 V-L. Para que sean lo que son: las Eliminatorias más parejas del mundo.
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