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La crisis generada por el caso “Carne Débil”, que puso al desnudo un mecanismo fraudulento de certificaciones de multinacionales de origen brasileño, tiene ya repercusiones concretas en los mercados internacionales. China y Corea del Sur ya prohibieron, en forma temporaria, las importaciones procedentes de los dos grandes frigoríficos involucrados en el escándalo. Uno de ellos es el holding BRF, productor de embutidos, salchichas y mortadelas. En la Argentina es dueño de las marcas Vienísima (salchichas), Goodmark (hamburguesas), Manty y Delicia (margarinas). JBS, la otra empresa sospechada, es también propietaria de Swift y de Cabaña Las Lilas.
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La Unión Europea también reaccionó en forma negativa este lunes. Pidió a las propias autoridades brasileñas que impidan las exportaciones de los frigoríficos que están implicados en el episodio “Carne Débil”.
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Los europeos transmitieron que hay “mucha inquietud” por la “calidad y la seguridad alimentaria” de sus habitantes. Pero aclararon que “no estamos suspendiendo la entrada de carne brasileña. Pero vamos a redoblar la vigilancia sobre las partidas que llegan a nuestros puertos”.
La UE reclamó también más aclaraciones sobre lo que ocurrió en Brasil con estos establecimientos (son 24 plantas investigadas y de ellas, hay 3 clausuradas). Precisamente, los europeos son los mayores importadores de carne bovina brasileña.
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