"Hay un rompimiento de lealtades hacia el gobierno"

Los informes sobre pobreza del sociólogo Luis Pedro España suelen desnudar la realidad venezolana. Este investigador de la Universidad Andrés Bello señala que la debacle del país es producto de la crisis económica provocada por el chavismo. Especialmente el desmantelamiento del aparato productivo. Apunta que esto llevó a un “rompimiento de lealtades hacia el gobierno”. También que las internas del oficialismo agudizan el escenario y que el apoyo al chavismo descendió al 20 o 23%.

¿Cómo describiría la crisis actual?

Nosotros tenemos ya tres años seguidos de una de las crisis más severas que ha tenido el país. Tiene que ver con la caída del precio del petróleo, pero además de eso a venido acumulado con un quiebre del sistema productivo nacional. Si antes un dólar de importación te servía para traer insumos con valor agregado nacional, ahora ese dólar sólo sirve para traer bienes finales que son muchos más costosos. Esta severa crisis de ingresos nos ha llevado a una situación de crisis social, de perdida de valor del salario y estamos en una situación inédita por los niveles de inflación y de abastecimiento.

¿Por qué se desató esta nueva ola de protesta?

Lo que desata esta crisis política fue el cierra del referéndum revocatorio del año pasado. Ahí se trancó el juego y el gobierno pensó que pese a ello iba a poder vivir. Pero digamos que el combustible, el contexto de esta crisis socio política es la crisis socio económica. Una crisis económica que además tiene responsables. La población percibe que el gobierno es el responsable. Pero el gobierno juega a resistir.

¿Hay sectores importantes que respaldan al chavismo?

Según las encuestas hay un 20% de la población que aún respalda al chavismo. En el mejor de los casos puede que lleguen al 23 o 25%. Pero se puede desglosar en diferentes tipos de chavismo. Hay un chavismo evidentemente agradecido por el reparto de unas 700 mil viviendas. Después hay otro sector que depende de la subsistencia del chavismo, como el empleado público. Y hay un sector rural que es profundamente dependiente de las políticas públicas.

Una especie de clientelismo

Sí, pero el clientelismo urbano ya lo perdieron. En cambio en las zonas rurales es mucho más fuerte. En las zonas rurales el único empleado que hay es el del Estado, la única escuela es la del Estado. El único ambulatorio sanitario es del Estado. Y ciertamente ponerse en contra del Estado es muy difícil.

Es una cuestión de subsistencia

Sí, claro, es por estas razonas. Pero fíjate, por razones ideológicas en el mejor de los casos es un 7 u 8% de la población como mucho.

La fidelidad ideología se fue quebrando en estos años

Yo creo que hay un rompimiento de lealtades. Y esto es evidentemente porque el pueblo le imputa al gobierno la crisis. Pero hay que aclarar algo. Hay una parte importante de la población que sigue teniendo las mismas preferencias que tenía 10 o 12 años atrás. Por ejemplo cierto control del Estado para que no haya abusos de precios, control de las empresas petroleras. Es decir, algunos principios populistas, cierta matriz de centro izquierda, muy primaria, tendiente a ser muy estatista. Eso no ha cambiado. Aquel gobierno del futuro que piense que toda la población se volvió neoliberal, está equivocado y va a ser un gobierno inviable.

¿Entonces qué pasó con el chavismo?

Yo creo que el chavismo se acabó. Mejor dicho, la forma en que se expresó esa cultura política de la centroizquierda que fue el chavismo, se acabó. Ahora, cualquier otro puede capitalizarlo.