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Una hamburguesa con queso. Este fue el motivo por el que un chico de Ohio, Estados Unidos, de ocho años llevó a su hermana de cuatro hasta un McDonald’s en la furgoneta de su padre. Según relató el niño más tarde, había aprendido a conducir mirando videos en YouTube.
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El agente de la policía de Palestina Este, Jacob Koehler, declaró en Fox 8 News que el padre se acostó el domingo y la madre se durmió en el sofá con los niños. Fue entonces cuando testigos afirman que vieron al pequeño conducir y llamaron a la policía de la ciudad, a unos 145 kilómetros al sureste de Cleveland.
Cartel de Mc Donalds en Miami, Estados Unidos (AP).
Según el agente, el niño condujo alrededor de kilómetro y medio al restaurante, a través de intersecciones y sobre las vías del tren, sin contratiempos. Además, los testigos dicen que parecía obedecer las normas de circulación: se detuvo en las luces rojas de los semáforos y dejó pasar a los otros autos.
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“Los trabajadores creyeron que los padres estaban en el asiento trasero, pero obviamente no estaban”, afirmó Koehler. “Cuando apareció la policía, el chico comenzó a llorar”, agregó.
Una vez en el McDonald’s de Market Street, un amigo de la familia que estaba comiendo en el restaurante avisó a los abuelos de los niños, que se comieron sus hamburguesas antes de que la policía llegara. Los oficiales continúan con la investigación del caso, aunque no se presentaron cargos.
Fuente: La Vanguardia
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