Al no tener noticias del joven, los familiares irrumpieron en la casa y se encontraron con un escenario macabro: el cuerpo del hombre de 24 años estaba recostado sobre su cama en avanzado estado de descomposición.
Una familia guardó el cadáver de un joven de 24 años durante tres días en Chaco porque creía que podría resucitar al difunto rezando. La denuncia fue realizada por el tío, quien aseguró que, al no tener noticias del hombre, todos actuaron “de manera sospechosa”.
Ocurrió en la localidad de Las Breñas. Según informó Todo Noticias, Gastón Claudio Chávez llevaba varios días desaparecido por lo que su familiar dio aviso a la Policía.
De acuerdo con el relato de su tío, al acercarse a la casa, la familia no lo dejó ingresar. Luego de que se realizó la denuncia, los policías se trasladaron a la casa de Gastón, en la que vivía con su madre, su hermana, su hija menor y la pareja de la madre, quienes se resistieron a que los oficiales entren.
Ante esto, la Policía fue hasta la casa donde el joven vivía con su hija, su mamá, su hermana, y la pareja de la madre. Una vez allí solicitaron ingresar a la vivienda para verificar que todo estuviera en orden.
Sin embargo, la mamá y la hermana les impidieron el ingreso y respondían con continuas expresiones “religiosas”.
La familia del joven fallecido pertenece a una iglesia evangélica
Debido a esto durante la madrugada se acercaron al domicilio familiares y allegados de Gastón, quienes rompieron la puerta principal e ingresaron a la vivienda.
Cuando llegaron a la habitación del joven se encontraron con una escena de terror. Según informó La Gaceta, el cuerpo de Gastón estaba acostado sobre la cama en avanzado estado de descomposición.
El fiscal ordenó la intervención de un médico forense y también intervino la Unidad de Protección Integral (UPI) para el resguardo de la menor. En tanto que el padrastro, la madre y la hermana del joven fueron llevados a una comisaría local.
En ese sentido, se constató que el joven había muerto tres días antes de que hallaran el cuerpo. Luego de que se realizara la autopsia, comprobaron que falleció por “muerte natural”.
“Los familiares tenían una actitud desaprensiva, no eran coherentes en sus expresiones, tenían muchas expresiones religiosas. Al consultarle sobre la persona que se buscaba, interponían a Dios en sus expresiones”, aseguró el jefe de la Comisaría de Las Breñas, Daniel Parra.