Una vez ubicados los cuerpos, se realizarán una serie de ceremonias. En primera instancia, habrá una misa a puertas cerradas a la que solo podrán asistir los familiares y gente cercana de las víctimas. Luego, llegará el turno del velatorio masivo.
Se abrirán las puertas del estadio del club para que los fanáticos también puedan despedir a los jugadores. El Arena Condá tiene una capacidad para 20 mil personas y se espera que asistan más de 100 mil, por lo que muchos seguirán todo desde afuera del estadio.